El día 15 de noviembre, se celebra el Shichi-Go-San, una de las
festividades sintoístas más importantes.
Shichigosan, significa literalmente,
Shichi (siete), Go (cinco) y San (tres), es decir, la edad de los niños y niñas
habilitados para participar en esta ceremonia ritual.
En esta ceremonia, los padres visten a sus
hijos con vestidos tradicionales y asisten a los santuarios sintoístas cercanos para celebrar el rito con el fin de expresar gratitud y rendir
plegarias para la seguridad y salud continua de los niños. En ocasiones se
realizan banquetes formales.
Desde tiempos antiguos, tanto los niños y como las niñas que llegan a los tres años tienen su cabello corto y no es hasta después de una ceremonia formal, llamada kamioki, cuando a los niños pueden dejar crecer su cabello. Para los niños de cinco años, usan por primera vez un hakama
(pantalón largo con pliegues), a través del rito de hakamagi. Para las niñas de
siete años, se realiza el ritual del obitoki, en donde se reemplaza el cinturón
obi estrecho usado en un kimono infantil por un cinturón más ancho.
Caramelo de los mil años:
Durante el Shichi-Go-San los niños reciben
un caramelo llamado Chitoseame (caramelo de los mil años). Es de color rojo y
blanco, de consistencia larga y delgada (15 mm de diámetro x 1 m de largo);
simboliza y asegura el sano crecimiento y la longevidad. Este confite viene
en una bolsa con una grulla y una tortuga, llamada tsurukame y representa la
larga vida en Japón. Viene forrado en un papel de arroz delgado y claro que
tiene parecido al plástico. Este caramelo es comestible y es muy popular entre los niños.
Enlaces:
http://goo.gl/WFT15R
Gabriela Biancotti