Un blog de HCR 4ªESO del IES COMPLUTENSE

lunes, 17 de noviembre de 2014

SICHI-GO-SAN

El día 15 de noviembre, se celebra el Shichi-Go-San, una de las festividades sintoístas más importantes.

Shichigosan, significa literalmente, Shichi (siete), Go (cinco) y San (tres), es decir, la edad de los niños y niñas habilitados para participar en esta ceremonia ritual.

En esta ceremonia, los padres visten a sus hijos con vestidos tradicionales y asisten a los santuarios sintoístas cercanos para celebrar el rito con el fin de expresar gratitud y rendir plegarias para la seguridad y salud continua de los niños. En ocasiones se realizan banquetes formales.

Desde tiempos antiguos, tanto los niños y como las niñas que llegan a los tres años tienen su cabello corto y no es hasta después de una ceremonia formal, llamada kamioki, cuando a los niños pueden dejar crecer su cabello. Para los niños de cinco años, usan por primera vez un hakama (pantalón largo con pliegues), a través del rito de hakamagi. Para las niñas de siete años, se realiza el ritual del obitoki, en donde se reemplaza el cinturón obi estrecho usado en un kimono infantil por un cinturón más ancho.

Caramelo de los mil años:

Durante el Shichi-Go-San los niños reciben un caramelo llamado Chitoseame (caramelo de los mil años). Es de color rojo y blanco, de consistencia larga y delgada (15 mm de diámetro x 1 m de largo); simboliza y asegura el sano crecimiento y la longevidad. Este confite viene en una bolsa con una grulla y una tortuga, llamada tsurukame y representa la larga vida en Japón. Viene forrado en un papel de arroz delgado y claro que tiene parecido al plástico. Este caramelo es comestible y es muy popular entre los niños.

Enlaces:
http://goo.gl/WFT15R

Gabriela Biancotti

lunes, 10 de noviembre de 2014

FESTIVIDADES ROMANAS EN NOVIEMBRE


EL CALENDARIO ROMANO




Noviembre recibe su nombre por ocupar el noveno lugar entre los meses del año (recuerda que el año romano empezaba en marzo).

Desde el punto de vista religioso, el mes de noviembre romano era, entre todos los del año, el menos importante.  Los romanos se dedicaban entonces a arar y sembrar la tierra. 

En este mes se efectuaban en el Circo las fiestas plebeyas instituidas en el años 220 a.C., para celebrar la reconciliación de patricios y plebeyos, y de las cuales habla el historiador Tito Livio. También se dedicaba a Feronia diosa compañera de Diana, Ceres, Fortuna y Flora; protectora de la fertilidad y la abundancia.

REPRESENTACIÓN DE NOVIEMBRE EN UN MOSAICO ROMANO
  • Las principales fiestas de noviembre eran:
    • Calendas de Noviembre (1 de Noviembre): festividad en la que todos los ciudadanos se iban al templo de Feronia a darle ofrendas. Feronia era la diosa protectora de la fertilidad y la abundancia, la cual era comúnmente asociada a Diana, la diosa Virgen de caza (Artemisa en la mitología griega); Ceres, la diosa de la tierra (Démeter para los griegos); Fortuna, la diosa de la suerte y el azar (Tique para los griegos) y Flora, diosa de la primavera, flores y jardines (Cloris para los griegos). 
    • Juegos plebeyos (4-17 de Noviembre): se celebraban en honor a Júpiter; una de las principales divinidades del panteón romano, y duraban hasta el 17 de Noviembre. Se celebraban cada año desde el siglo III a.C. Se empezaron a celebrar cuando las relaciones entre patricios y plebeyos; gracias a la Ley de las XII Tablas, se normalizaron.
    • Mundus patet (8 de Noviembre): último día en que se consideraba abierta la puerta del mundo subterráneo.
    • Banquete de Júpiter (13 de Noviembre): durante la celebración de los Juegos Plebeyos, los Septemviri Epulones organizaban en nombre de la plebe un festín a Júpiter, al que acompañaban Juno y Minerva; el dios comía recostado y las diosas sentadas. La comida era frugal y el mobiliario sencillo. Los Septemviri Epulones eran uno de los colegios sacerdotales mayores que se instituyó en el año 196 a.c. y estaba formado por plebeyos. Su principal función era preparar este banquete para estas divinidades.


Elena Melgar Alcalde


lunes, 3 de noviembre de 2014






Samhain



Esta festividad celta es la que hoy en día se conoce como Halloween, La Noche de Todos los Santos. Representa la muerte del Dios astado (Cernunnos) para después renacer en Yule, el 23 de diciembre.

Es el año nuevo celta y pagano. Samhain significa literalmente final del verano”, pero el término Halloween tiene raíces anglosajonas: All hallows Eve, que quiere decir “víspera de todos los santos”.

Es una ceremonia en la que el mundo de los vivos y el de los muertos entran en contacto. Debido a eso, los aldeanos celtas dejaban encendida una vela por cada difunto que hubiera en su familia, de lo contrario, sus espíritus les perseguían durante toda la noche, causándoles pesadillas. Antiguamente, uno de los muchos rituales que los druidas realizaban este día era adivinar el futuro, ayudados por los espíritus de la naturaleza, que recuperan su poder en Samhain.

La tradición de ir pidiendo dulces por las casas (truco o trato) tiene varios orígenes. Viene de la época en la que muchos irlandeses llegaron a América, en medio de la Gran Hambruna irlandesa, y se hizo común ir pidiendo comida a los vecinos. Por otro lado, Halloween coincide con la época de cosecha de manzanas en América, de ahí proceden las manzanas de caramelo o manzanas dulces, un dulce típico de la festividad. Otro dulce típico, sobre todo en Irlanda, es el pastel de frutas. Precisamente en dicho país hay una tradición de meter una moneda y un anillo, entre otras cosas, dentro del pastel. Aquellos que encuentren el anillo, encontrará el amor ese año, y los que encuentren la moneda, encontrarán la fortuna.

La expresión “truco o trato” tiene su origen en una leyenda popular de las aldeas celtas. Se contaba que uno de los espíritus que salían al mundo de los vivos en Samhain, una especie de diablillo, se dedicaba a ir por las casas pidiendo truco o trato. Convenía más hacer un trato, fuera el que fuera, ya que los “trucos” solían ser jugadas bastante violentas, como quemar la casa o matar al ganado.

PARA SABER MÁS:











































Sara García Alonso